Bonito título le he puesto a la entrada de hoy... ha sido mi versión
fina del "desvirgando al viejo japonés" que en un principio quería
poner.Y es que por fin llegó el día en que el BMW 507 de Tokyo Plamo
cayó en mis hiperactivas manos. Mi coche favorito de toda la gama Tokyo
Plamo y que se ha hecho esperar varios años hasta que por fin me he
podido dar el capricho.
No
es un coche difícil de conseguir... cada año aparecen 8 o 9 unidades en
estado impoluto en ebay, muchas de manos del mismo vendedor japonés (santav6).
No obstante si algún vendedor europeo lo pone a la venta es preferible
decantarse por él ya que así nos ahorramos las más que posibles tasas de
aduana que tan de moda están últimamente. Es curioso que si buscamos
imágenes en google del BMW 507 de Tokyo Plamo casi todo lo que aparezca
sea del coche todavía en blister en perfecto estado.
Yo
no tuve ninguna duda: cuando me llegara el coche lo montaría...
disfruto montando kits y este estaba seguro que me haria disfrutar como
pocos. Montar un kit que llevaba desde ¿1965? esperando su turno no
tiene precio!
Así que le eché las últimas fotos al blister impoluto y manos a la obra!!
Solo armado con un afilado cutter y Micro Kristal Clear me lancé contra el Anciano Samurai!!!
Jeje... carrocería liberada!!
Vamos!! Que no hay compasión ni arrepentimiento!! Tooodo
fuera!!
Y ahora lo primero, montar el chasis. Estos kits de Tokyo
Plamo es habitual no verlos con motor y es que algunos de los kits que
iban destinados al mercado japonés no lo llevaban. El motor que le
correspondería es el Mabuchi 16D... así que después de buscar por casa
el "más mejor" monto el chasis tal y como indican las instrucciones.
Ahora
toca quitar rebabas del coche... la verdad es que el coche no tiene un
acabado muy fino que digamos. Las rebabas sobresalen por todos lados y
los cristales cuesta que encajen bien ya que les falta material por los cuatro
costados.
Y
llegados aquí primera sorpresa! Coño, si el piloto no cabe en el
habitáculo! Lógico le han metido un piloto completo a 1/24 como en el
resto de sus coches a 1/32. Me fijo en las instrucciones y la solución
es que solamente tengo que usar la cabeza desechando los brazos. Vamos que el BMW 507 lo conducirá un Bobblehead.
Llegados a este punto sólo queda acabarlo de montar!
Y premio para los que hayan llegado hasta el final... chica y canción todo en uno: Jess Greenberg con Highway to Hell. Abrumador!!